martes, 16 de abril de 2013

AMOR HACIA MI PELUQUEROOO!!!!




AMOR HACIA MI PELUQUERO






Claves para entenderte con tu peluquero

Te pasamos cinco claves para que la próxima vez que vayas a la peluquería, obtengas el resultado que estabas buscando. 

TOMA NOTA!!

 

 

Es una cuestión de estadísticas: todas las mujeres, por lo menos una vez en su vida, salieron de la peluquería detestando el corte que les hicieron y repitiendo la frase "esto no fue lo que le pedí".

 La primera hipótesis que elaboramos:  el peluquero forma parte de una secta que detesta el pelo y quiere cortes malos esparcidos por todo el mundo. No suena muy real, ¿no? Lo más probable es haya habido un error de comunicación

Te pasamos estos consejos para que puedas trasmitirle al peluquero el mensaje sobre lo que quieres, sin errores de por medio.


1. Una imagen vale más que mil palabras. No temas parecer la loca que aterriza en la peluquería con una docena de fotos. ¡Es lo mejor que podés hacer para terminar satisfecha con tu corte! Buscá distintas fotos, de distintos ángulos, que muestren exactamente lo que quieres.
(Llevar una foto de Natalie Portman no va a hacer que salgas pareciéndote a ella, pero vas a acercarte lo más que puedas).




2. Habla de sensaciones. No sólo hay que usar palabras como capas, rebajado, recto... Explicale a tu peluquero usando todos los adjetivos que se te ocurran. Por ejemplo: quiero un look relajado, tipo playero, con muchas ondas, bien irregular, sexy, con volumen.



3. Muéstrale como lo quieres de corto. Para que no haya errores, muestrale con el pelo seco, y señalando con el dedo (en vez de hablar de centímetros), cuál es el largo que quieres para tu pelo.



4. Decir la verdad. Si te lo lavas todos los días y secas, si usas la planchita de forma compulsiva, o si nunca te hiciste un baño de crema, ¡dilo! Responde todas las preguntas de tu peluquero con total sinceridad. Eso le va a dar una idea de qué tipo de cuidados recibe tu pelo, y él va a poder aconsejarte un corte acorde a tu rutina. Si te realizas un corte nuevo, totalmente distinto al que tenías, no te olvides de preguntarle como peinarlo, secarlo y mantenerlo cuidado.




5. Si no quieres hablar, no lo hagas. Una conversación forzada e incómoda es peor que el silencio. Si no sale un tema para conversar, no hay necesidad de hacerlo. Solo siéntate y disfruta de tu corte u otro servicio de belleza.



Espero que os haya gustado y que a partir de ahora os entendais mejor con vuestro estilista!!!  BESITOSSSS